La nueva política de fichajes del Real Madrid para competir con los ‘clubes estado’
Los fichajes del Real Madrid han cambiado en los últimos años. Desde la llegada a la presidencia de Florentino Pérez, el conjunto merengue era el club que realizaba las incorporaciones más sonadas a base de talonario. Sin embargo, con la aparición de los llamados ‘clubes estado’ (Manchester City, PSG, Newcastle…), los blancos han tenido que cambiar de táctica para poder competir de tú a tú con los más grandes.
Dos son las directrices más utilizadas por la dirección deportiva del Real Madrid en las últimas temporadas que, de momento, están funcionando a las mil maravillas. Por un lado, hacerse con los servicios de los más jóvenes talentos cuando todavía tienen un precio de mercado ‘asequible’.
Es el caso de Vinicius Junior o Rodrygo, por citar un par de ejemplos. Ambos llegaron al Santiago Bernabéu a cambio de unos 30 millones de euros cuando apenas habían cumplido la mayoría de edad. De hecho, tuvieron que quemar etapas en el filial madridista antes de afianzarse en el primer equipo. Ahora, su valor de mercado es muy superior y son piezas importantes en la plantilla dirigida por Carlo Ancelotti.
Sin embargo, en los últimos tiempos, los fichajes del Real Madrid suelen llegar a coste cero. Futbolistas consagrados y con experiencia que, cuando entran en su último año de contrato, son tentados por un escudo y una camiseta que cuenta con 14 Copas de Europa en sus vitrinas.
De esta forma llegaron a Concha Espina futbolistas de la talla de Rudiger o Alaba. Dos centrales de jerarquía que militaban en grandes de Europa como Chelsea y Bayern Munich respetivamente. Fichajes que son garantía de rendimiento inmediato que llegan totalmente gratis al Real Madrid por lo que el riesgo es prácticamente nulo.
Cierto es que Florentino juega en desventaja con PSG o Manchester City que ofrecen auténticas fortunas a futbolistas como Mbappé o Haaland. Ambos hubieran estado encantados de vestir la camiseta del Real Madrid pero han recibido ofertas irrechazables. Con todo, el equipo de la capital de España se las ha arreglado para seguir peleando (y ganando) a los ‘nuevos ricos’ de Europa.
